
Durante la última década en Michoacán.
Por Arturo Molina
Morelia, Mich., a 21 de abril del 2025.- En medio de la crisis hídrica que atraviesa Michoacán, la Secretaría de Medio Ambiente del estado reveló la existencia de 35 mil 250 “ollas” de agua construidas en su mayoría de manera irregular en los últimos diez años.
De acuerdo con el informe oficial, gran parte de esta infraestructura hídrica se concentra en municipios como Tacámbaro, Uruapan, Tancítaro y Maravatío, zonas que coinciden con regiones de alta producción de aguacate y berries, sectores agrícolas en expansión que demandan grandes volúmenes de agua.
El titular de la dependencia estatal, Alejandro Méndez, explicó que más de 15 mil de estas ollas se encuentran actualmente vacías debido al estiaje. Sin embargo, el sistema de monitoreo satelital Guardián Forestal detectó que al menos 20 mil 619 embalses continúan llenándose, a pesar de la falta de precipitaciones.
Las autoridades sospechan que muchas de estas estructuras se abastecen mediante escurrimientos naturales, pozos profundos y tandeos de agua, en su mayoría sin autorización oficial. Por ello, personal de la Comisión Nacional del Agua (Conagua) y de la Comisión Estatal del Agua y Gestión de Cuencas (CEAGC) iniciará un proceso de verificación en campo.
El reporte indica que el 65% de las ollas tiene menos de una hectárea de superficie y una capacidad de almacenamiento de hasta un millón de litros, lo que representa un serio desequilibrio para las cuencas hidrográficas del estado.
La construcción de estas obras, muchas veces sin cambio de uso de suelo autorizado en zonas boscosas, refleja la presión que ejercen los monocultivos sobre los recursos naturales y plantea un desafío urgente para la gestión ambiental en Michoacán.